Anthrax no solo es una leyenda viva del thrash metal, también ha sido una de las bandas más creativas a la hora de integrar elementos de la literatura, el cine y los cómics en sus letras. Desde sus primeros álbumes hasta sus producciones más recientes, la banda ha construido un imaginario propio inspirado en la cultura pop más oscura.
Una de sus mayores fuentes de inspiración ha sido el escritor Stephen King. Entre sus referencias más evidentes está “Among the Living”, tema basado en la novela The Stand, centrada en un mundo devastado por una plaga y con un villano carismático, Randall Flagg, que marcó profundamente al guitarrista Scott Ian. El propio músico llegó a escribir el prólogo para una edición especial del libro, este libro sirvió como base para dos miniseries, la primera en 1994 y la segunda en 2020. Le siguen canciones como “A Skeleton in the Closet”, inspirada en Apt Pupil libro que tuvo su version para cine en 1998 protagonizado por Ian McKellen, y “Misery Loves Company”, extraída directamente del relato Misery con su respectiva versión para cine en 1990 protagonizada por kathy bates.
Más adelante, canciones como “Lone Justice” y “Breathing Lightning” retomaron elementos del universo de The Dark Tower, la épica saga fantástica de King que también ha influido a otros artistas del metal y el rock. Esta conexión con el autor se ha mantenido viva durante décadas.
La más reciente colaboración no oficial entre Anthrax y el escritor se dio en el cuento “Finn”, incluido en la colección You Like It Darker, donde el personaje principal es torturado con la canción “Madhouse” a todo volumen. La escena se volvió viral entre los fans, y Scott Ian comentó en redes sociales:
“Me encanta saber que, en algún pequeño rincón, formo parte del King-Verse.”
En entrevistas previas, el guitarrista explicó cómo su entorno y gustos influyeron en su forma de componer:
“¿Qué sabía yo a la tierna edad de 22 años? Conocía cómics, horror y ciencia ficción. No podía escribir sobre desamor o una infancia horrible… simplemente escribía sobre lo que conocía.”
También afirmó que, después del disco Among the Living, cambió su enfoque creativo:
“Esas son obras que obviamente me inspiraron y sobre las que escribí canciones. Pero eso cambió después de ese álbum… ya no escribo canciones sobre obras existentes. Leo todo el tiempo, y las cosas se quedan en mi cabeza… tal vez algo me influya o me dé una idea.”
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| Blue Velvet de David Lynch |
El cine también ha dejado su huella en Anthrax. El tema “Now It’s Dark”, incluido en State of Euphoria, está directamente inspirado en la película Blue Velvet de David Lynch, y adopta la voz del psicópata Frank Booth, interpretado por Dennis Hopper. La repetitiva frase “now it’s dark” y la intensidad del tema evocan el mismo caos mental del personaje en el film.
En el terreno del cómic, Anthrax dejó su marca con “I Am the Law”, una canción dedicada al emblemático Judge Dredd, protagonista del cómic británico 2000 AD. La banda incluso consiguió los derechos oficiales para utilizar la imagen del personaje en la portada del sencillo y en camisetas. Este homenaje no fue casualidad: Ian era fan de Dredd desde una visita a Londres en los años 80, cuando descubrió el cómic por primera vez.
A lo largo de su carrera, Anthrax ha demostrado que el metal no solo puede ser agresivo y directo, sino también narrativo y visual. Otros ejemplos incluyen “Black Lodge”, un tema sombrío y atmosférico inspirado en la serie Twin Peaks, compuesto junto al músico Angelo Badalamenti, colaborador habitual de David Lynch. También destaca “Efilnikufesin (N.F.L.)”, una crítica irónica inspirada en la trágica muerte del comediante John Belushi, conocido por su exceso y su figura irreverente.
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| John Belushi |
Incluso en el cine moderno, la música de Anthrax ha tenido presencia. Su versión de “Antisocial” fue utilizada en la película IT (2017) durante una de las escenas clave, reforzando aún más los lazos de la banda con el universo de Stephen King.
Anthrax ha convertido su amor por los libros, las películas y los cómics en una parte esencial de su arte. En lugar de limitarse a los temas típicos del metal, han optado por explorar universos narrativos y trasladarlos al escenario con furia, velocidad y mucha distorsión.
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