RAYMOND HERRERA REVELA QUE DAVE MUSTAINE “NO SOPORTÓ” SU REMEZCLA DE SYMPHONY OF DESTRUCTION.



El exbaterista de Fear Factory, Raymond Herrera, volvió a abrir una vieja anécdota que muchos fans desconocían: su inesperada colaboración con Megadeth hace casi veinte años. En conversación con Story Mode, el músico —actualmente compositor y productor para videojuegos, cine y televisión— recordó el curioso episodio en el que trabajó una remezcla del clásico Symphony of Destruction, la cual no dejó precisamente encantado a Dave Mustaine.

Herrera explicó que todo ocurrió durante la gira conjunta entre Fear Factory y Megadeth en 2006. Mientras compartían carretera, el baterista se acercó a Mustaine con una propuesta bastante directa: “Estoy trabajando en un videojuego y quiero incluir uno de tus temas en la banda sonora. ¿Podrías pasarme la pista instrumental o los archivos de la sesión?”. Para su sorpresa, Mustaine aceptó sin mayores vueltas y al poco tiempo le envió el material original del tema incluido en Countdown to Extinction (1992).

Con los archivos en mano, Herrera y su equipo se sumergieron en el proceso de remezcla durante un par de semanas, dando forma a una versión orientada hacia la electrónica industrial. Cuando llegó el momento de mostrársela al líder de Megadeth, el encuentro no fue tan entusiasta como él esperaba. “Estábamos almorzando antes de un show, se la puse… y no le gustó nada”, recuerda entre risas. Aun así, Herrera insistió en que funcionaría perfecto dentro del videojuego, incluso ofreciendo cubrir los costos de mezcla y grabación si Mustaine seguía sin quedar conforme.

Lo más sorprendente es que, tras todo el mal rato, Mustaine terminó aprobando la remezcla, aunque según Herrera, nunca logró apreciarla realmente.

La relación de Herrera con la industria del gaming no empezó ahí. A mediados de los 90, comenzó a gestionar licencias de Fear Factory para múltiples títulos, lo que lo llevó a fundar Herrera Productions (más tarde 3volution Productions). Su habilidad para cruzar metal, industrial, rap, techno, orquestación y otros estilos lo convirtió en un colaborador recurrente para gigantes como Microsoft, Sony, Sega, EA, Ubisoft, Capcom, THQ, Namco, Midway y muchos más.

Su sello como baterista —preciso, mecánico y demoledor— fue fundamental en los primeros quince años de Fear Factory. Para finales de los 90 ya tenían tres discos en su catálogo y habían girado con leyendas como Black Sabbath, Slayer, Iron Maiden y los propios Megadeth. Tras la separación de 2006, la banda resurgió con una nueva formación en 2009, aunque a día de hoy Dino Cazares es el único miembro clásico que permanece activo.




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